La transexualidad y su problematica

Este lugar esta creado para tener un lugar para poder exponer toda la problemática con la que nos enfrentamos a diario las personas transexuales solo por ser diferentes al resto de las personas.

11 marzo 2006

Los transexuales asturianos tendrán atención psicológica y endocrina



El Principado no costeará operaciones de cambio de sexo «porque la demanda es pequeña y no resultaría efectivo», pero garantiza que «el sistema nacional de salud» las cubra.

«Este es el año de recuperar la dignidad de los transexuales», así se manifestó ayer la coordinadora del Área Transexual del PSOE, Carla Antonelli. Con ese objetivo, los transexuales asturianos dispondrán, a finales de este año, de una unidad de endocrinología y psiquiatría provista de las prestaciones adecuadas para evitar personas automedicadas, con tratamientos no controlados o sin la atención psicológica necesaria adecuada a su estado. Es uno de los primeros pasos que se dan para lograr la normalización de las personas que viven sin el sexo sentido. Así lo explicó ayer en rueda de prensa el director general de la Organización de las Prestaciones Sanitarias, José Ramón Riera Velasco, durante la presentación del libro 'Transexualidad: hombres y mujeres con todos los derechos'.

En la presentación de libro participaron, además de Carla Antonelli y José Ramón Riera, el presidente del Conseyu de la Mocedá del Principado, Paulino Feito Alonso, y el presidente de Xega Xoven, Jaime González Álvarez.

El libro recoge las conclusiones a las que llegaron especialistas y afectados durante la celebración del seminario del mismo nombre que se llevó a cabo el año pasado en Avilés y ofrece un análisis de los factores que más influyen a aquellas personas que viven en un cuerpo que no sienten como suyo.

Riera recordó que en el Programa Afectivo Sexual para Asturias que actúa dentro del ámbito educativo y social, el Principado propone una educación sexual basada en valores como la democracia, la justicia, la igualdad, la solidaridad, el respeto, la convivencia y el rechazo de la exclusión social.

Indicó que la cirugía no estaría incluida dentro de la unidad que está elaborando el Gobierno regional, porque entiende que «el número de casos que hay en Asturias es pequeño». De esta forma, aquellos que requieran una operación quirúrgica de cambio de sexo tendrán que realizarla fuera de la región.

Sin exclusión

Las intervenciones de reasignación de sexo, según Riera, se harían con cargo a la medicina pública, ya que en la cartera de servicios comunes del proyecto de la Ley de Identidad de Género «ya no hay una exclusión de la cirugía de cambio de sexo, por lo que hay total garantía de que el sistema nacional de salud cubre esta prestación».

Por su parte, Carla Antonelli añadió que, al igual que el año pasado los gais y lesbianas vieron reconocidos sus derechos con el matrimonio, este es el año de «recuperar la dignidad de los transexuales». Según Antonelli, es necesario que la ley que prepara el Gobierno central proporcione a los transexuales unos documentos que se ajusten a su verdadero sexo y que «aunque algunos no estén reasignados de genitales, puedan cambiar su nombre y su sexo».

En este sentido, aseguró que dicho reconocimiento es necesario para evitar la exclusión y la discriminación de las personas transexuales, sobre todo en el terreno laboral.

Finalmente, Antonelli manifestó su confianza en que al final de esta legislatura todos los transexuales tengan sus derechos y que la cirugía que precisen esté incluida en la sanidad pública.

Recientemente, el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, anunciío la presentación de una Ley de Identidad de Género de la que aún no se conoce ningún borrador, pero en la que la Federación de Lesbianas, Gays y Transexuales (FELGT) pretende que se recojan sus reivindicaciones básicas: el requisito de dos años de vivencia del sexo sentido para que se pueda tramitar el cambio de sexo en la documentación de la persona y el requisito de seis meses de vivencia del sexo sentido para que se pueda tramitar el cambio de nombre en la documentación de la persona mediante un procedimiento no judicial.